Día 10

Viernes 10 de enero de 2014. Ngong, Nairobi, Kenya. 16:00 hs

Me levante a eso de las 7, fui al baño, desayune livianito (te y una rodaja de pan) y me fui afuera a entrenar. Empecé entrando en calor como siempre, después hice una repasada de todos los puños y patadas, pero flojito, para que fuera entrada en calor, creo que hice 4 de cada una. Y después me focalice en las formas. No tenía mucho tiempo, así que las hice una vez. Pero me concentre en hacerlas lo mejor que podía. Estaba bien entrada en calor, así que no tenia excusas! Jajaja. Cuando termine hice dos series de 50 abdominales y 2 series de 30 fuerzas de brazos. Me tome un litro de agua y me fui a bañar.

Después de bañarme me senté y desayune como correspondía. Otra feta de pan, media batata y otra taza de té.

El plan del día era ir a un pueblo que estaba bastante alejado, y al que nunca habíamos ido, pero que aparentemente tenía un shopping, donde podíamos conseguir wifi. Así que nos cambiamos y a eso de las 9:30 salimos con Sophia a nuestra travesía. Tomamos el matatu hasta Ngong y desde ahí un bus hasta este pueblo, que se llama “The Junction”. Una señora me dijo que me siente al lado de ella y que ella me decía donde me tenía que bajar. Mi desconfianza argentina me hizo prejuzgar, porque la verdad que la mujer, una dulzura. (Y digo mujer porque todavía no puedo calcular la edad de la gente acá, quizá era una chica como yo... No lo sé...).

Efectivamente, The Junction es el nombre del shopping. Fue la primera vez después del aeropuerto que vi a alguien, que no sea mi reflejo en el espejo, ni Sophia, de piel blanca!!  Bueno, igual después de un rato me canse de ver a gente blanca. Aparentemente es el lugar de contención. Jajajajajajaj!! Malditos cerdos capitalistas! Venimos a África y nos concentramos en un shopping!!!!

The Junction tiene un Subway, un KFC, muchísimos locales de ropa, y HASTA UN CINE!!! Jajaja, me lo tomo en broma, pero fue muy reconfortante sentir un poco de “civilización” (civilización como la que estamos acostumbrados nosotros, los porteños burgueses) después de tantos días de exilio campestre. Igual, yo estaba mejor de Sophia, que parecía desesperada! Jjajajaja...

Después de recorrerlo todo (todo el shopping era del tamaño de la planta baja del Abasto), en el patio de comidas encontramos wifi, así que conecte la tablet, conecte el celular y me dedique a escuchar la sinfonía de notificaciones, mails, chats y porquería que llegaban. Y cuando termino de sonar, y termine de chequear, decidimos que íbamos a comer en KFC.

Después de comer fuimos dar otra vuelta por el shopping y mirar en los negocios algunas cosas, porque estábamos bastante al pedo, y cuando intentamos ir afuera, nos dimos cuenta que no había nada interesante alrededor. Así que estuvimos dando vueltas y mirando cosas que obviamente, no íbamos a comprar (igual algunos precios de acá son más baratos que en Argentina!).

Yo ya había decidido que a las 17, como MUY tarde, me iba. Porque no quería llegar cuando estuviera oscureciendo. Y además Sophia había arreglado que se encontraba con una amiga y no volvía conmigo, así que mas todavía, quería llegar cuando todavía hubiera sol.

Así que emprendí el regreso, tomando primero el bus hasta Ngong, y desde ahí camine hasta la parada y tome el matatu que me traía a casa. Llegue aproximadamente a las 18:30. Había muchísimo transito en la ruta, y la verdad que tarde bastante más de lo que creía, pero por suerte, llegue con plena luz y no me tuve que preocupar por eso. Fue todo una experiencia viajar solita sola en ambos colectivos, hacerme entender y entender a los “boleteros” y guiarme para no perderme (justo yo! Que soy el despiste en persona! Jajaja!!) Pero fue muy positiva. Cuando decida ir a Nairobi Capital (quizá mañana, quizá el domingo) tengo que hacer el mismo camino.

 “civilización”  100%